En primer lugar, debemos conocer cuál es nuestro nivel de ciberseguridad. Para ello, es imprescindible realizar una auditoría de seguridad para conocer nuestra situación interna y de vulnerabilidades que nos permita conocer nuestro nivel real de ciber-resiliencia, a partir del cual desarrollar y ejecutar un plan de acción que permita corregir las debilidades identificadas.

Para conseguir alcanzar esa postura de seguridad real en nuestros clientes, es necesaria la correcta orquestación de diferentes soluciones. Por supuesto, toda esta tecnología debe ir apoyada en los servicios más avanzados de monitorización de riesgos de seguridad y respuesta a incidentes.

Dirigir un negocio se ha vuelto diferente de las prácticas convencionales. La amenaza es invisible pero anticipada al mismo tiempo. Ya viene, seguro. Es solo una cuestión de «cuándo» y hacer esta pregunta a su equipo de seguridad: «¿Cómo de rápido y eficiente puede su equipo IT recuperar el sistema comprometido?»

Nuestro programa de monitorización continua no solo evalúa las amenazas y vulnerabilidades, sino que también permanece alerta para una acción oportuna y una recuperación rápida antes de que sea demasiado tarde.